PROFESORA: Rayda Valentin Contreras
Ana María Huaynate
Yurivilca
GRADO: 3° A, B, C,
D, E, F
- ¿QUÉ
NECESITAREMOS?
Lee con mucha atención la información:
LECTURA BÍBLICA:
El servicio fue una de las mayores manifestaciones del amor de Cristo hacia nosotros. Desde que inició su ministerio en la tierra, tras ser bautizado por Juan el Bautista, nuestro Señor dedicó su tiempo a enseñar sobre el reino de los cielos, sanar a los enfermos, ayudar a los necesitados, preparar a sus discípulos, ¡resucitar a los muertos!, etcétera.
Debió ser abrumador, día tras día, permanecer en esa actitud de servicio, ver a las multitudes venir en pos de Él en busca de ayuda, y ofrecer siempre compasión y misericordia a aquellos que lo necesitaban. Sin embargo, es obvio que su servicio era una respuesta natural de su amor. Era éste lo que lo impulsaba a continuar haciendo bien a los demás, y a seguir obedeciendo la voluntad de su Padre.
El servicio de Jesús era parte de su naturaleza humilde. Y dicho servicio fue tan legítimo, tan constante y tan extremo, que pronto se convirtió en sacrificio. El Padre lo envió, pero Jesús decidió entregar su vida voluntariamente por todos nosotros, a pesar de que sabía que al final el precio sería la muerte. Su tiempo, su dedicación, su vida entera fueron dedicados a un propósito específico, a una misión única: la salvación de la humanidad, y no se detuvo sino hasta llegar al final, la cruz.
Lo que debe inspirarnos a servir es el amor. El amor a Dios y el amor a los demás. Dice el apóstol Pablo: “Cualquier trabajo que hagan, háganlo de buena gana, pensando que trabajan para el Señor y no para los hombres”. (Colosenses 3:23). Sin embargo, sabemos que también el amor a los demás nos inspira a servirlos cuando tienen alguna necesidad. No para obtener alabanza y mérito, sino por un amor puro, no sólo incondicional sino sacrificial.
A lo largo del tiempo, los santos se han constituido como los intercesores de los hombres ante Dios. Con su ayuda hemos obtenido todo tipo de bienes espirituales pues, desde el cielo, velan porque la Gloria de Dios siga presente en la tierra.
La Iglesia anima a todas las personas a practicar las virtudes de los santos y seguir su ejemplo pues, con sus acciones en la tierra, hoy gozan de una recompensa mayor: el cielo.
¿Cómo alcanzar la santidad? En muchas ocasiones, el Papa Juan Pablo II recomendó acciones sencillas pero muy significativas, como practicar la oración, es decir, entablar un diálogo con Dios desde lo más profundo de nuestro corazón.
Asimismo, explicó que otra pieza clave para ser santos es participar de la Eucaristía pues, a través de ella, podemos acercarnos más a Jesús. Otra actividad a poner en práctica es la confesión, la cual, nos permite recuperar nuestra amistad con Dios.
El Papa Juan Pablo II concluye con lo siguiente “escuchar la palabra de Dios, pero también anunciarla”, es decir, comunicar la buena nueva a los demás a través de nuestro comportamiento.
Por su parte, el Papa Francisco hace hincapié en que convertirse en santo implica una serie de acciones que debemos poner en práctica durante los diferentes “estados de vida”, es decir, en cada situación o etapa que atravesamos.
Por ejemplo, si eres padre o abuelo, tu misión consistirá en ayudar a tus hijos o nietos a conocer a Jesús. El Sumo Pontífice también rescata el hecho de ser pacientes, como una cualidad que podemos ir desarrollando y que nos acerca a la santidad.
Otro ejemplo de la vida cotidiana que plantea el Papa Francisco se da en las actividades laborales. El Vicario de Cristo explica que se puede alcanzar la santidad cumpliendo con honestidad y eficiencia el trabajo, además de otorgar nuestro tiempo para servir a los demás.
El camino a la santidad puede ser recorrido por todos. Bien lo afirmaba el Sumo Pontífice “es un don que se ofrece a todos, nadie está excluido, por eso constituye el carácter distintivo de todo cristiano”.
Trabajemos con valentía y mucha alegría para cumplir esta meta. Recordemos que alcanzar la santidad debe ser sinónimo de vivir con amor y ofrecer el testimonio de Jesús en cada una de las actividades que realicemos en la cotidianidad. - ¿QUÉ
APRENDERÉ HOY? RETO:Discierne los acontecimientos de la vida desde el encuentro personal con Dios a través del servicio y el amor como un camino para la santidad en su familia y en su escuela, comprometiéndose con acciones orientadas a la construcción de una comunidad de fe, inspirada en Jesucristo
- INSTRUMENTO
DE EVALUACIÓN:ME AUTOEVALÚO
LISTA DE COTEJO
Apellidos y nombres
FECHA:
/07/2021
Grado:
Tercero
Sección:
Nº
ASPECTOS / CRITERIOS
SI
NO
01
El compromiso esta enfocado en la ayuda de mi comunidad
02
Mi compromiso, lo he realizado con sinceridad y seriedad
03
Al escribir he tenido en cuenta las enseñanzas de la clase
04
El compromiso que he realizado es realizable




